Mis manos tiemblan de miedo, y de pronto me asalta la idea de no continuar, por temor a profanar un "arte" cuya esencia vive en la naturaleza, pero que por suerte o por desgracia como otras tantas cosas, no escapa a lo que muchos llaman desarrollo, modas, avances tecnológicos, etc.
Cuando escribo estas lineas me asalta constantemente a la cabeza y no puedo dejar de pensar en todos los grandes maestros que ha tenido y tiene este arte, y que la mayoría de los aficionados no hemos tenido o tenemos la suerte de conocer y así poder aprender de su saber y experiencia. Pienso que debería de haber una ley que les obligara a transmitirnos y enseñarnos todo su saber, para que así, todos los que practicamos esta caza avancemos en su comprensión, porque en mi opinión cada vez somos más "practicantes" y cada vez "cazamos peor". No es otra nuestra intención, que dar a conocer a todos los amantes de este arte, en la medida que la tecnología lo permita, unas humildes pinceladas de esta fascinante caza, con la intención de que algún maestro de verdad en el tema, corrija los errores que seguro vamos a cometer; pero precisamente con el inmenso deseo de aprender de quienes saben, es por lo que nos atrevemos a equivocarnos. Maestros, sabios practicantes del arte de la caza de la perdiz con reclamo, auténticos aficionados, devotos, corrijannos, enséñennos, sáquennos de nuestra profunda ignorancia en la que nos encontramos inmersos, en la práctica de este arte. Es su deber enseñar al que no sabe. Por favor. Los cazadores de perdiz con reclamo se lo agradecerán. Gracias. Tirofijo.
